Pablo Montoya, William Ospina y Fernando Vallejo, tres ganadores colombianos del Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos, asumen frontales posiciones públicas contra la represión y la injusticia en su país.
“Cuando explotó la crisis social, el pasado 28 de abril, provocada por la reforma tributaria, el manejo deplorable de la pandemia y la inadmisible desigualdad social que reina en Colombia, y siguieron los eventos sangrientos en los que el actual gobierno ha reprimido las justas protestas, decidí interrumpir todas mis actividades con la cancillería y las embajadas. Cancelé conferencias sobre mis libros y sobre literatura colombiana en Managua, Copenhague y El Cairo. Incluso, he rechazado la posibilidad de presentar con la embajada de Colombia en Egipto mi novela Lejos de Roma que ha sido traducida al árabe y publicada por el Centro Nacional para la Traducción de este país”.
Así se expresó el escritor Pablo Montoya, en carta pública (El Retiro, 29 mayo de 2021) enviada a sus lectores a través de medios nacionales e internacionales, y que se encuentra disponible en el siguiente vínculo:
Explica que “…desde el 2015, a raíz del premio internacional Rómulo Gallegos que recibí por mi novela Tríptico de la infamia, empecé a recibir invitaciones de la cancillería colombiana y de las diferentes embajadas que este país tiene en el mundo. Las acepté porque permitieron que hablara sobre mi obra en diferentes universidades, centros culturales y ferias del libro. Lo hice porque así actuaba como un representante de la actual literatura colombiana. Y también porque había votado por los acuerdos de paz y me parecía digno expresar, en total libertad, esta actitud de pacifista convencido”.
A partir del estallido de la crisis a finales de abril, destaca Pablo Montoya, optó por suspender las giras organizadas a través de las embajadas colombianas. “Esta es mi forma, entre otras, de protestar ante la situación actual, y de solidarizarme con el actual descontento popular colombiano. Me niego rotundamente, como escritor, profesor universitario, intelectual y ciudadano, a apoyar las actividades culturales que este gobierno, brutal e injusto, organiza en el exterior”, enfatizó.
La historia está en las calles
El escritor William Ospina en la columna del 8 de mayo de 2021, que publica semanalmente en el diario El Espectador comenta con respecto a la crisis desencadenada en su país que “la avalancha llevaba muchos meses represándose y solo hizo falta la propuesta estúpida y cínica de la reforma tributaria para que se desbordara”.
Ahí manifiesta que “Colombia necesitaba unirse, y nada une tanto como una desgracia común. La desgracia ha consistido en varias plagas simultáneas: un viejo sistema injusto y corrupto hasta los tuétanos, una pandemia pésimamente manejada y un Gobierno central inepto pero capaz de iniciativas torpes y malignas”.
El texto de esta columna se encuentra disponible en:
Posteriormente, el 15 de mayo de 2021, en columna titulada “Una carta para Puerto Resistencia”, afirma: “Estuvimos juntos siempre, pero solo ahora estamos juntos. Siempre nos conocimos y apenas empezamos a conocernos. ¿Quiénes son estas muchachas y estos muchachos firmes y conmovidos que nos hablan por primera vez? Son los que fuimos, sueñan lo que soñamos, hacen por fin lo que siempre quisimos hacer. Están aquí desde hace siglos y sin embargo acaban de nacer, y por sus labios hablan estos mares, y por sus manos corren estos ríos, y son de todos los colores: han nacido en los valles, en las montañas, en los litorales, en las ciudades.
El texto está disponible en el siguiente vínculo:
De modo más reciente, el 29 de mayo, Ospina exige “que por fin el pueblo dicte la ley”. En la columna así titulada sostiene lo siguiente: “Es porque los gobernantes no son capaces de hablar con el pueblo cuando éste se desespera y exige, por lo que aquí tienen que terminar hablando con bandas de secuestradores y de masacradores después de años de desangre y de cientos de miles de muertos”. El planteamiento está disponible aquí:
Vete, Duque
“Duque tú no tienes ningún mérito para estar presidiendo el destino de cincuenta y un millones. Eres un vivo de la política. Otro. Otro más. Como el que te puso. Y nada más.
Duque tú eres el culpable de los muertos y el vandalismo del paro. Tú lo provocaste. ¡Miserable!”
Estas contundentes expresiones las formula el escritor Fernando Vallejo como columnista invitado del sitio LosDanieles.com, sitio Web de periodistas neogranadinos comprometidos, que han construido esta ventana ante las restricciones a la libertad de expresión en los tradicionales medios de prensa colombianos.
Al respecto, puede verse:
Además, en el canal de youtube de Los Danieles, las palabras de Fernando Vallejo pueden escucharse en su propia voz:
Dignos ganadores del Premio Rómulo Gallegos
Roberto Hernández Montoya, presidente de la Fundación Celarg, en Caracas, destaca que estos tres escritores críticos han sido dignos ganadores del Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos, que otorga el Estado venezolano a través del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos y que ahora expresan el compromiso acompañando a su pueblo frente a la autocracia y la injusticia.
Fernando Vallejo fue ganador de la XIII edición del certamen, en 2003, con la obra “El desbarrancadero”. William Ospina lo obtuvo con “El país de la canela” en la XVI edición (2009). Mientras que Pablo Montoya se lo acreditó en la XIX edición (2015) con su obra “Tríptico de la infamia”.
Recientemente, Montoya integró el jurado de la XX edición del certamen, resultando ganadora la escritora argentina Perla Suez, autora de “El país del diablo”, en 2020, premio que será entregado este año 2021. Por cierto, el escritor argentino Vicente Battista, quien también fue integrante del jurado de esta misma edición del certamen, le hizo llegar un mensaje a Pablo Montoya a través del portal visconversa.com:
“Estimado Pablo, nos conocimos hace un año, cuando junto a Laura Antillano compartí con vos el jurado del Premio Rómulo Gallegos. Acabo de leer tu carta, gratifica saber que hay escritores que, como vos, no vacilan en decir su verdad, que es la mía, en momentos como los que hoy vive Colombia, va mi solidaridad y un abrazo fuerte, Vicente Battista”.
